Hotel Rous
AtrásSituado en la Avenida del Doctor Peset Aleixandre, en el distrito de Rascanya, el Hotel Rous se presenta como una opción de alojamiento en Valencia que genera opiniones diametralmente opuestas. Para algunos viajeros, representa un hallazgo con una excelente relación calidad-precio, mientras que para otros ha supuesto una de las pe ores experiencias de hospedaje imaginables. Este establecimiento, que en diversas plataformas aparece como "Solo Adultos", parece operar en dos realidades paralelas, y entender ambas es crucial antes de tomar una decisión de reserva.
La Cara Positiva: Precio, Trato y Tranquilidad
Varios huéspedes describen su estancia en el Hotel Rous de manera muy favorable, destacándolo como una de las mejores opciones dentro de los hostales en Valencia para quienes buscan un presupuesto ajustado. Uno de los puntos más repetidos en las reseñas positivas es su competitivo precio. Clientes que llegaron a la ciudad buscando un lugar económico donde pasar la noche, como un viajero que aterrizó en el aeropuerto de Valencia, se encontraron con un establecimiento que superó sus expectativas en cuanto a valor. La percepción general de este grupo es que se ofrece mucho más de lo que se paga, calificando la relación calidad-precio como "extremadamente interesante".
La limpieza y el confort son otros dos pilares de las experiencias positivas. Una clienta habitual afirma que, en cada una de sus visitas, ha encontrado las habitaciones impecables, bien organizadas y muy cómodas. Este testimonio contrasta fuertemente con las críticas negativas, sugiriendo una posible inconsistencia en el mantenimiento del lugar. Además, se destaca la tranquilidad del establecimiento; a pesar de estar ubicado en una avenida con bastante tráfico, el ruido exterior parece no ser un problema gracias a las ventanas de doble acristalamiento, que garantizan un descanso silencioso. La amabilidad del personal también recibe elogios, con una mención especial para una recepcionista llamada Francy, descrita como una persona atenta, simpática y siempre dispuesta a ayudar, lo que contribuye a una sensación de acogida y bienestar.
La Cruz de la Moneda: Graves Acusaciones y Deficiencias
En el otro extremo del espectro, se encuentran testimonios que pintan un cuadro alarmante y profundamente negativo del Hotel Rous. Las críticas más severas apuntan a problemas de higiene de gran calibre. Un huésped relata una experiencia que califica de "asquerosa", detallando una habitación con una cama sucia, almohadas en pésimo estado, cojines con manchas de "líquidos blancos", un sillón impregnado de aceite y grifos sucios. La misma persona menciona un armario roto y un persistente y extraño olor a lejía. Para respaldar sus afirmaciones, asegura haber tomado fotografías de la situación.
Quizás la acusación más preocupante es la que sugiere que el establecimiento es utilizado para fines que van más allá del turismo convencional. Un huésped afirma haberse topado con un lugar donde trabajan "chicas de compañía", describiendo un constante trasiego y jaleo en los pasillos durante toda la noche. Esta percepción de que se ofrecen habitaciones por horas en Valencia para la prostitución choca directamente con la visión de otros clientes que, si bien reconocen la posibilidad de alquiler por horas, niegan haber presenciado actividad alguna de esa naturaleza. Esta contradicción genera una gran incertidumbre sobre el ambiente real del lugar.
Además de estos graves problemas, se señalan deficiencias importantes en el diseño y las comodidades de las habitaciones. Una de las quejas más insólitas describe una habitación donde la taza del váter estaba literalmente pegada al cabecero de la cama, eliminando cualquier atisbo de privacidad y generando malos olores. A esta pareja se le ofreció como alternativa una habitación sin ventanas, que compararon con una "celda bien decorada". La falta de calefacción funcional y de mantas adecuadas en invierno es otra de las carencias reportadas, forzando a un cliente a dormir sin abrigo en pleno frío.
Problemas con la Gestión y las Reservas
La profesionalidad en la gestión de reservas y la atención al cliente también ha sido puesta en entredicho. Un usuario relata una experiencia muy negativa a través de Airbnb, donde, tras haber realizado una reserva con seis meses de antelación, el propietario le exigió el triple del precio pactado un mes antes de la fecha. Al negarse, su reserva fue cancelada unilateralmente, calificando al negocio de "auténticos sinvergüenzas". Otro caso expone la negativa del dueño a devolver el dinero de una noche (€113) a unos clientes que decidieron marcharse inmediatamente al ver el estado de la habitación. Incluso las reseñas más positivas señalan pequeños fallos, como la dificultad para contactar por teléfono, sugiriendo que la atención no está disponible las 24 horas.
Análisis Final: ¿Para Quién es el Hotel Rous?
El Hotel Rous es un claro ejemplo de alojamiento económico en Valencia que parece ofrecer experiencias radicalmente distintas dependiendo, quizás, de la habitación asignada o del día. La disparidad en las opiniones de hostales en Valencia rara vez es tan marcada como en este caso.
- Puntos a favor: Si se tiene suerte, es posible encontrar una habitación limpia, cómoda y silenciosa a un precio muy bajo, con un personal amable. Su buena insonorización es un plus.
- Puntos en contra: Existe un riesgo real de encontrarse con una habitación con graves problemas de higiene, diseños disfuncionales, falta de servicios básicos como la calefacción y un ambiente nocturno ruidoso y potencialmente sórdido. Los problemas con la gestión de reservas son también una bandera roja.
En definitiva, reservar en el Hotel Rous es una apuesta. Puede ser la solución perfecta para viajeros con un presupuesto muy limitado que no teman arriesgarse, pero es una opción desaconsejable para familias, viajeros de negocios o cualquiera que valore la certeza de un estándar mínimo de limpieza y profesionalidad. Se recomienda encarecidamente a los potenciales clientes leer las reseñas más recientes en múltiples plataformas antes de comprometerse, ya que la calidad del servicio parece ser extremadamente variable.