Albergue de peregrinos de Benavente

El Albergue de peregrinos de Benavente, una parada clave en la Vía de la Plata del Camino de Santiago, presenta actualmente un panorama complejo y desalentador para quienes buscan un lugar donde pernoctar. La información más crucial para cualquier viajero es que el establecimiento se encuentra cerrado. Diversas fuentes y experiencias de usuarios confirman esta situación, que se ha prolongado en el tiempo, generando incertidumbre y problemas logísticos a los peregrinos que planifican su ruta contando con este alojamiento económico.

Según diversas notificaciones, el cierre se debe a obras de rehabilitación. De hecho, a finales de 2024, el Ayuntamiento de Benavente anunció la finalización de una primera fase de estas obras, con una inversión destinada a adecuar y mejorar los espacios. Se proyectó una segunda fase con un presupuesto adicional para continuar con las mejoras, con el objetivo de ofrecer una experiencia más grata a los futuros usuarios. Sin embargo, a pesar de estas intenciones, la realidad para el peregrino que llega a pie es encontrarse con las puertas cerradas, sin una fecha clara de reapertura a la vista, lo que convierte la búsqueda de hostales baratos en una tarea urgente e imprevista.

Una Mirada al Pasado: Servicios y Carencias

Cuando estaba en funcionamiento, el albergue municipal de Benavente, situado en la antigua estación de ferrocarril y rehabilitado en 2010, cumplía una función esencial. Ofrecía un total de 12 plazas distribuidas en dos habitaciones por un precio muy asequible, que rondaba los 4 o 5 euros por noche. Este coste lo convertía en la opción predilecta para aquellos que realizan el Camino con un presupuesto ajustado. La gestión corría a cargo del ayuntamiento, y para acceder era necesario presentar la credencial de peregrino. Las llaves se recogían en la Oficina de Turismo o, fuera de su horario, en las dependencias de la Policía Local.

A pesar de su utilidad, las opiniones sobre sus instalaciones eran dispares y a menudo negativas. Varios usuarios lo describían con adjetivos como "cutre" o "básico", señalando una clara necesidad de actualización mucho antes de su cierre por reforma. El punto más crítico, mencionado de forma recurrente, era la insuficiencia de sus servicios sanitarios: disponía de un único cuarto de baño para las 12 plazas. Esta carencia es significativa, especialmente en un hostal destinado a personas que llegan tras una larga jornada de esfuerzo físico y necesitan instalaciones adecuadas para su higiene y noche de descanso.

La Problemática Actual: El Impacto del Cierre

La situación actual ha transformado la percepción del albergue. La frustración es el sentimiento predominante entre los peregrinos que, tras caminar decenas de kilómetros, como los 68 que separan Zamora de Benavente, descubren que su opción de alojamiento planificada no está disponible. Las reseñas recientes son unánimes en este aspecto, relatando cómo este imprevisto les obliga a buscar a última hora alternativas mucho más costosas, como hoteles o pensiones, alterando considerablemente su presupuesto. Esta experiencia ha llevado a algunos a sentir que la ciudad no cuida a los peregrinos, un colectivo vital para la ruta jacobea.

La falta de información clara y actualizada agrava el problema. Mientras algunas fuentes indican un cierre temporal por obras, la propia ficha del negocio en plataformas digitales muestra datos contradictorios, llegando a figurar como "cerrado permanentemente". Esta ambigüedad hace imposible una planificación fiable. Además, han surgido especulaciones entre los afectados, como la mencionada en una opinión que sugiere que la presión de otros establecimientos de hostelería de la zona podría estar influyendo en la prolongada inactividad del albergue, con el fin de captar a los peregrinos. Si bien esto no es un hecho confirmado, refleja el nivel de descontento y desconfianza que ha generado la situación.

Instalaciones y Servicios (Cuando Operativo)

Para entender lo que ofrecía este albergue de peregrinos, es útil detallar sus características previas al cierre:

• Capacidad: 12 plazas en literas, divididas en dos habitaciones.
• Precio: Alrededor de 5 euros, incluyendo en ocasiones sábanas desechables.
• Instalaciones: Contaba con una cocina equipada con menaje básico y frigorífico, una zona común, calefacción y un espacio para guardar bicicletas.
• El gran inconveniente: Un solo baño y un solo inodoro para todos los huéspedes.
• Gestión: Municipal, exclusivo para peregrinos con credencial y sin posibilidad de reserva previa.

Estas características lo definían como un alojamiento económico y funcional, pero con deficiencias importantes que las reformas anunciadas pretenden solucionar. La estructura, ubicada en la antigua estación, posee un encanto particular y se encuentra junto a zonas verdes, lo que podría convertirlo en un lugar muy agradable si las mejoras se completan de forma efectiva.

y Recomendaciones para Futuros Peregrinos

A día de hoy, el Albergue de peregrinos de Benavente no es una opción viable para dormir en Benavente. La recomendación principal para cualquiera que esté planificando su paso por esta localidad de la Vía de la Plata es no contar con este establecimiento. Es imprescindible buscar y, si es posible, reservar hostal u otro tipo de alojamiento con antelación para evitar sorpresas desagradables.

Algunos caminantes han optado por continuar hasta la siguiente localidad, Villabrázaro, a unos 7,5 kilómetros, donde existe otro albergue que sí está operativo. Para quienes decidan quedarse en Benavente, será necesario explorar las opciones de hostales, pensiones y hoteles privados. Consultar las opiniones de hostales en línea puede ser una buena estrategia para encontrar una alternativa adecuada. La situación del albergue municipal es un recordatorio de la importancia de verificar el estado de los servicios en el Camino de Santiago, ya que pueden cambiar sin previo aviso, afectando profundamente la experiencia del viaje.